Caso Resuelto: Pamplona, Clínica Vitaldent, 48.577,42 €

Situación, diagnóstico y tratamiento

La paciente acude a la clínica Vitaldent con prácticamente todas sus piezas naturales, si bien, cabe la posibilidad de que padezca una enfermedad periodontal por cuanto se aprecia leve reabsorción ósea alrededor de los implantes, circunstancia que finalmente no puede afirmarse por cuanto la clínica prescinde de efectuar las pruebas oportunas para determinarlo con seguridad.

En la clínica Vitaldent le diagnostican un tratamiento que consiste en la extracción de todas las piezas naturales que tiene en el maxilar superior, la colocación de seis implantes y sobre estos una prótesis de metal cerámica. En el maxilar inferior, el tratamiento consiste en la colocación de dos implantes y sobre estos dos fundas de cerámica. Ante ello, la clínica inicia el tratamiento dental sin haber otorgado consentimiento informado, en el que se le explica a la cliente las alternativas al tratamiento propuesto y las consecuencias negativas probables o posibles que puede conllevar el mismo. Además de lo anterior, en el tratamiento se suceden los errores que acaban comportando el fracaso del mismo.

Daños y prejuicios

Así, no se efectúan las pruebas necesarias para planificar un tratamiento como el que nos ocupa (tan solo se realiza una radiografía panorámica de la boca). Al no existir planificación, la ejecución también es defectuosa, hasta tal punto que de los 8 implantes inicialmente previstos, a la paciente se le acaban colocando 21, y al final del tratamiento solo le quedan 3 piezas que nos son útiles para ninguna rehabilitación. No se efectúan estudios para determinar el motivo por el que se pierden los implantes.

Dificultades

Al mismo tiempo, durante el seguimiento, tampoco se dan cuenta de que la paciente padece caries, no las tratan, estas se agravan y la paciente acaba perdiendo las piezas que sin duda podía haber salvado si se hubieran tratado a tiempo. Asimismo, el ir colocando implantes sin ningún criterio provoca que se pierda el hueso maxilar, hasta tal punto que ahora para poder poner implantes de nuevo la paciente deberá someterse a complicadas cirugías de regeneración ósea.  

Indemnización final

Sin perjuicio del daño físico padecido, no se puede obviar el padecimiento moral de la paciente, pues cuando llega a la clínica Vitaldent es apta para la rehabilitación más optima que existe tanto a nivel funcional como estético, y cuando finaliza el tratamiento es portadora de una prótesis removible (de “quita y pon”) que es el tratamiento más sencillo que existe. Por dicho motivo, el Juzgado dicta Sentencia por la que acuerda indemnizar a la paciente en la suma de 48.577,42.-€., más los intereses legales.